Después del paso de Nicole, las calles quedaron inundadas, las carreteras y las casas sufrieron daños, y miles quedaron sin electricidad. Más de 300.000 clientes en Florida se vieron afectados por cortes anteriores. Ese número se había reducido a más de 73.000 el jueves por la noche, según PowerOutage.us
Una vez más, los ciudadanos de la Florida intentan recuperarse después de que Nicole golpeara el estado el jueves, dejando al menos cuatro personas muertas, además de destrozar edificios y dejar algunas casas inhabitables mientras avanzaba con peligrosas marejadas ciclónicas y fuertes vientos.
Nicole golpeó la costa este de Florida, justo al sur de Vero Beach, como huracán de categoría 1 en las primeras horas de la mañana de este jueves, antes de debilitarse a tormenta tropical y luego a depresión. Llegó cuando el estado todavía se estaba recuperando del catastrófico huracán Ian, que abrió un camino de destrucción en Florida después de golpear la costa occidental hace solo unas semanas.
Nicole fue el primer huracán que impactó Estados Unidos durante noviembre en casi 40 años, informó CNN.
A medida que se acercaba la colosal tormenta, las escuelas y universidades cerraron, se cancelaron cientos de vuelos, los aeropuertos detuvieron sus operaciones y algunos residentes costeros fueron evacuados.
Después del paso de Nicole, las calles quedaron inundadas, las carreteras y las casas sufrieron daños, y miles quedaron sin electricidad. Más de 300.000 clientes en Florida se vieron afectados por cortes anteriores. Ese número se había reducido a más de 73.000 el jueves por la noche, según PowerOutage.us.
Dos personas murieron después de ser “electrocutadas por un cable eléctrico caído” en el Condado de Orange, dijo la Oficina del Sheriff en un comunicado de prensa.
Se están investigando dos muertes adicionales posiblemente relacionadas con la tormenta después de un accidente automovilístico fatal, según el alcalde del condado de Orange, Jerry Demings.
Los cables eléctricos caídos en las calles inundadas se encuentran entre una multitud de peligros que los residentes deben intentar evitar después del huracán cuando regresan a sus hogares, y las cuadrillas trabajan para limpiar los escombros de las carreteras y realizar reparaciones de emergencia en las carreteras arrasadas.
Nicole se debilitó a una depresión el jueves por la noche, según una actualización de las 10.00 de la noche del Centro Nacional de Huracanes. El ciclón se dirige hacia el norte y se espera que se mueva hacia el suroeste de Georgia el jueves y el viernes por la noche, y luego atraviese el oeste de las Carolinas más tarde el viernes.
Mientras tanto, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, extendió el estado de emergencia a todos los condados, “simplemente porque no estamos seguros del alcance de los impactos, en particular en el noroeste de Florida“, dijo el jueves por la mañana.
Las casas se derrumban en el océano
En el condado de Volusia, al menos 49 propiedades frente al mar, incluidos hoteles y condominios, se han considerado “inseguras” después de Nicole.
“El daño estructural a lo largo de nuestra costa no tiene precedentes”, dijo el administrador del condado, George Recktenwald, en una conferencia de prensa, y agregó que es probable que se identifiquen más edificios como comprometidos.
Los edificios costeros golpeados por Ian se vieron aún más comprometidos por la erosión costera a medida que se acercaba la tormenta, lo que llevó a los agentes a ir de puerta en puerta el miércoles para evacuar a los residentes de edificios estructuralmente defectuosos en el condado de Volusia antes de la llegada de Nicole.
A medida que el ciclón azotaba la región, las casas frente al mar en Wilbur-By-The-Sea, una comunidad de islas de barrera frente a Daytona Beach, se derrumbaron en el océano.
El residente Trip Valigorsky abrió la puerta principal de su casa y vio un enorme agujero que conducía a las olas del océano rompiendo donde una vez estuvo su sala de estar. Señaló donde solían estar la televisión y el sofá.
Estaba en estado de shock, le dijo a WKMG, afiliada de CNN.
“Estuve aquí el martes por la noche y vi cómo se deterioraba el muro y luego me desperté el miércoles por la mañana y el muro había desaparecido por completo, así que comencé a evacuar”, dijo Valigorsky. “Y ahora aquí estamos”.
Un día antes, 22 casas en la comunidad de la isla barrera fueron evacuadas después de que los funcionarios las consideraran inseguras.
Nicole ha empujado un gran volumen de agua hacia la costa, destrozando la infraestructura que Ian ya estaba sobrecargando.
La marejada ciclónica alcanzó un máximo de alrededor de 6 pies (1,8 metros) el jueves por la mañana, enviando el agua del océano a las calles y empujando hacia la costa sobre las mareas excepcionalmente altas asociadas con la luna llena de esta semana.
El video de un dron mostró casas casi colgando de los acantilados y hoteles de Daytona Beach derrumbándose en el océano después de la tormenta.
“La devastación es casi imposible de comprender. Imagínese ver cómo su casa se derrumba en el océano”, tuiteó el sheriff del condado de Volusia, Mike Chitwood.
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